EL JUEGO DE LA CANDELITA

Por: Giovanni Cegarra

Definitivamente nos están bailando todo tipo de danza en la Asamblea Nacional Bolivariana con esto de la Fiesta Brava en Venezuela, nos tienen en un tome y dame, nos mandan a nadar en aguas turbolentas, nos tienden emboscadas entre gallos y media noche, nos hacen jugar a la candelita con los antitaurinos, nos enfrascamos en dimes y diretes, pese a que se ha demostrado con argumentos y fundamentos suficientemente bien sustentados, que la Fiesta de los Toros y el toro de lidia, tienen razón de ser, contribuye al desarrollo socio, económico, cultural, turístico, patrimonial, tradicional y costumbrista de una población, ciudad, Estado, país, que es un arte y cultura que debemos preservar, defender e impulsar y en sus efectos, mantener la especie que da vida al toro de casta.

A lo hecho pecho......nos juegan la candelita.

La semana pasada, en una Plenaria de la Comisión de Recursos Naturales y Ordenación del Territorio de la Asamblea Nacional Bolivariana, fue aprobada en primera discusión, el Proyecto de Ley de Protección de los Animales Domésticos y esta semana, va tener su segunda discusión, para darle su definitiva aprobación, lo que han catalogado como una gran noticia en lo taurino, porque eliminaron el Artículo 6 del Proyecto referido, que proponía la eliminación de los toros coleados, las peleas de gallo y las corridas de toros.

Todo el mundo feliz, que era un gran triunfo pero, ¿hasta que punto?, porque igual los "humildes, abnegados y sinceros Parlamentarios" escurrrieron el bulto hacia las Alcadías del interior del país, las cuales tienen la facultad a través de un referendum de consulta popular, definir si se pueden dar ciertos espectáculos entre los que figuran las corridas de toros, las peleas de gallos, los toros coleadoss u otros eventos, por lo que el reaccionar de quienes nos adversan no se dejó esperar mucho ya que en la ciudad de Valencia, Estado Carabobo, su Concejo Municipal tenía en discusión un Proyecto de Ordenanza de Protección Animal a través de la cual, no elimina las corridas de toros pero si condiciona la realización de las mismas, pretendiendo cambiar sus cánones de hecho y derecho, como la eliminación del tercio de la suerte de vara y el rejoneo, con esto de la prohibición del uso de animales de especies diferentes en un espectáculo.

Vaya juego de la candelita de los Señores Parlamentarios "se lavan las manos como lo hizo el Tribuno Ponco Pilatos".

Se libra una dura y difícil lucha en una cruzada nacional taurina para rebatir todos los argumentos de los antitaurinos esgrimidos tanto en el Parlamento Bolivariano Venezolano como en el Concejo Municipal del Libertador en Caracas y en Valencia, serán rebatidos con la misma contundencia pero también es cierto que se ha caído en su juego de la candelita, han sabido hacer su trabajo y han logrado desviar, la real lucha taurina venezolana, la Ley Taurina Nacional, cuya aprobación con las modificaciones a que hubiere a lugar, pondría fin a este jueguito de la candelita y no digo ninguna mentira.

Los taurinos venezolanos, todos por igual han puesto su esfuerzo y voluntad, salimos a la defensa de la Fiesta Brava, en la medida de las disponibilidades de cada uno y a través de todos los espacios que a la mano se han tenido para ello, eso no lo puede negar nadie pero también es muy cierto que los adversos a la Fiesta, han sabido dar zancadillas y accionado bien sus trampas y cuando se conoce de su accionar es que se escuchan los taurinos y listo, nada más, se cae en letargo, una verdad que no se puede tapar porque así es.

Este juego de la candelita al que nos han conducido los de la Asamblea Nacional Boliviariana es por demás preocupante y ya la pasividad taurina debe despertar, salir del letargo y tomar la calle, alzarnos en todo el país donde hay una Plaza de Toros, una Feria con espectáculo taurino, sinque se nos tome de desestabilizadores del orden público e involucrar a las Alcaldías, Cámaras Municipales, de Comercio y Turismo, Vecinos, Consejos Comunales, Gobernaciones, comunidad en general, en una gran unidad y lucha nacional, en defensa de la Fiesta Brava en Venezuela, porque de lo contrario, la candelita Parlamentaria y la de ciertos Concejales en el interior del país, nos quemará como los muñecos que emulan a Judas en la Semana Santa

Que no se entienda que estoy en contra de la Fiesta Brava, sencillamente "no hay peor sordo que el que no quiere oir". La lucha debe ser reorientada para ganar, en buena ley, la guerra contra quienes nos adversan e izar muy en alto, la Ley Taurina Nacional.