ASÍ ACONTECIÓ LA
TEMPORADA TAURINA DE TOVAR
Por: Eutiquio Hevia P.
Cronista e Historiador
La Novillada para los Noveles Muchachos
Figuró en la organización Mario Valero, con muchas bemoles en su cometido y abrió plaza el pasado 7 de septiembre un manojo de esperanzas, por los muchachos que actuaron. Se lidiaron novillos de “Los Aranguez” con edad, para: Antonio José Ramos quien abrió plaza sin poder acomodarse con el novillo que le tocó en suerte, se le vieron algunos detalles pero no redondeo faena y falló con el acero quedando su actuación en Palmas. Jonathan Guillen, fue el segundo de la terna, su ejemplar salto al callejón, ya en la arena realizó faena ante novillo apagado, en su actuación escuchó música y falló con el acero. Silencio. El tercer ejemplar fue para Tomás Martínez, quien vistió un terno Celeste y Oro, le vimos voluntarioso y con deseos de agradar, ligó algunos pases con la pañosa recibiendo voltereta sin consecuencias, por perderle la cara al burel, a la hora de matar pinchó y dio una vuelta inmerecida. Ángel Miguel Guía, fue el cuarto novillero, interpretó dos largas cambiadas de rodillas, ligo algunos pases y recibió voltereta sin consecuencias y culminó con una ración trasera y contraria. Silencio. Jesús Enrique Colombo, vistió un terno blanco y oro (significa la pureza e inocencia) este joven novillero que va en vía de una excelente formación, al novillo que le tocó, le llamaron “Cubeto” ejemplar con pocas condiciones en la embestida y donde el taribero no se amilanó sacándole partido y dejando constancia de su valía con la capa y la pañosa y justificándose ante ese público que lo esperaba con ansias, pinchazo y estocada que le valió la ovación del soberano. Antonio Suárez, ligó buenos lances con la capa y la muleta dibujo derechazos y naturales con temple los que fueron musicalizados, mató de dos intentos siendo el segundo completo hasta la cinta. Palmas. Miguel Molina “El Ovejo” vistió un terno rosa y oro, salió con deseos de agradar, lucho en sacarle partido al ejemplar que no respondió a la capa y con la muleta, pero el muchacho encorajinado demostró voluntad y deseos de agradar, ante un marmolillo que no respondió y a la hora de matar estuvo errático. Silencio. Cerró plaza José A. Salas, un joven que demostró estar muy verde y que solo cumplió a medias su cometido, el tiempo lo irá madurando en estas lides, pero por acá se empieza, con voluntad y deseos de agradar. Silencio.
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Jonathan Guillén en la lidia del ejemplar de "La Cruz de Hierro" durante la novillada de postín de la Feria de Tovar 2011 (Foto: Jesús "Cucú" Rincones) |